Las parteras son un referente de empoderamiento en las comunidades rurales en las que se encuentran. Ellas impulsan a las mujeres a ejercer, sin prejuicios, su derecho fundamental a la planificación familiar y hacerlas dueñas de sus futuros.
Por ello, la Organización Mundial de la Salud y otros organismos han dado mayor peso al desarrollo de capacidades de los programas de partería.
En Fundación Marie Stopes México capacitamos a más de 400 parteras, parteros y promotores de salud sobre derechos sexuales y reproductivos para que a su vez compartan estos conocimientos en sus comunidades. También les apoyamos en el uso y manejo de anticonceptivos, entre ellos la colocación de implantes subdérmicos y dispositivos intrauterinos (DIU), prevención de embarazos no deseados, asistencia médica y prevención de infecciones de transmisión sexual.
De esta manera las mujeres en zonas rurales y de difícil acceso obtienen información confiable sobre sus derechos sexuales y reproductivos, sobre métodos anticonceptivos, así como insumos.
Problemática que resolvemos
Las parteras proporcionan servicios de salud como lo han realizado desde la antigua Mesoamérica. Su conocimiento y habilidades se refuerzan generación tras generación, siendo la primera instancia de salud en sus comunidades y el único apoyo al que miles de mujeres y familias recurren en las zonas más marginadas de nuestro país.
Por ello, nos sumamos a su labor con el desarrollo de nuevas habilidades e insumos médicos que contribuyen a minimizar el riesgo de adquirir Infecciones de Transmisión Sexual y embarazos no deseados.
¿Cómo lo hacemos?
- Trabajamos en más de 56 municipios de los estados de Chiapas, Guerrero, Oaxaca, Veracruz, Puebla y Morelos.
- El Programa Parteras está integrado por personas que, además de hablar español, hablan lenguas indígenas como Zapoteco, Tseltal, Tsotsil y Tlapaneco, de esta manera la información sobre salud sexual y reproductiva es correctamente transmitida.
- Distribuimos insumos médicos y anticonceptivos para que las parteras y proveedores de salud comunitarios puedan ofrecer servicios de Salud Sexual y Reproductiva de calidad y a precios muy accesibles.