Es muy bonito sentir amor por una persona. Tocar su piel, disfrutar de su calor corporal, mirarla a los ojos y sonreír. Nos han enseñado tanto a amar al otro: a la pareja, a los hijos, a los padres e incluso a un ser supremo, que nos hemos olvidado de nosotros mismos, de nuestro amor propio, y nos hemos puesto en segundo, tercero o último lugar.
Nunca (o casi nunca) nos han mencionado la importancia del AMOR PROPIO, que no es presunción ni arrogancia, puesto que a quien debemos amar —por sobre tod@s y todo— es a nosotros mismos.
Por eso, el AMOR PROPIO está integrado por pensamientos, sentimientos y acciones positivas hacia nosotros mismos. Yo me amo, por eso estudio para tener un mejor futuro, yo me amo y me alimento mejor, yo me amo y no fumo, yo me amo y no tolero la infidelidad ni el maltrato de una pareja, yo me amo y acepto mi cuerpo, yo me amo y evito un embarazo no deseado, yo me amo y uso condón más un anticonceptivo de largo plazo.
Enseguida algunos testimonios de amor propio y anticoncepción
“No quería hacerlo con condón porque, dijo, creía en mí”
Comencé a tener una relación con un chico de la “uni” y cuando llegó el momento de iniciar nuestra vida sexual, le dije que siempre debería usar un preservativo, pero me respondió que no, que él confiaba en mí y que yo seguramente estaba “muy limpia”… jajajaja, le respondí que no era asunto de limpieza, sino de responsabilidad. Yo usaba el DIU para evitar un embarazo y él debería usar un condón por aquello de las infecciones, pero no quiso me tachó de egoísta. Así que lo terminé, al poco tiempo embarazó no a una sino a dos compañeras de la carrera.
Rebeca, 27 años
“Como que tienes ‘mucha’ sexualidad”
Antes de la pandemia nos dieron una clase de anticonceptivos y una compañera preguntaba de todo, que si el preservativo se rompía qué debía una hacer, que si se olvidaba la pastilla ¿se tomaban dos al otro día o solo una?… todas las mujeres preguntábamos, pero esa compañera mucho más y todo anotaba en su libreta.
Entonces, la maestra le dijo: “como que tienes ‘mucha’ sexualidad, ¿no? Mi compañera le dijo: mucha o poca es mía y quiero ‘hacerlo’ sin errores cuando llegue el momento. La maestra se enojó y la mandó a la dirección por ‘respondona’. Pero todas admiramos a esa compañera porque nunca se queda callada.
Dani, 16 años
Me equivoqué y lo pago muy caro.
Yo sabía que mi esposo (q.e.p.d.) me engañaba, andaba con otras mujeres desde que nos casamos, pero nunca le dije nada. Desde el primer año de casados supe que yo era una de tantas. Pasaron los años, tuve a mis hijos y también me contagió sífilis. Pero eso no fue lo grave, sino que cuando cumplimos 34 años de casados, él comenzó a enfermar y un día decidió que yo me durmiera en otra recámara. Así que me mudé a la de mis hijas. Yo lo veía muy desmejorado, perdía peso, vomitaba y no iba al doctor, se negaba. Yo jamás dije nada y al poco tiempo murió. Cuando lo enterramos llegó un compadre y me dijo que él había muerto de SIDA, yo no lo quería creer, pero mis hijos (ya adultos) me insistieron en hacerme un examen de sangre y salí positiva a VIH.
Me arrepiento mucho de haberme quedado callada, de no haberme dejado de él, pero me criaron con la idea de que el marido siempre tiene la razón y se le obedece. Me equivoqué y lo pago muy caro.
Ofelia, 76 años
“¿Y tú por qué no te embarazas?”
Mi vecina siempre andaba muy arreglada, salía con sus 3 hijos a trabajar todas las mañanas, y me hacía burla porque yo casi nunca uso maquillaje. Siempre me decía: ¡tú, como pareces niño no te embarazan! ¿por qué no te has embarazado si tienes novio? (¡o sea tener novio o esposo no es sinónimo de embarazo!). Le dije que yo iba al ginecólogo y usaba anticonceptivos, que prefería gastar en mi salud que en maquillaje. No dijo nada, al paso de unos 2 años me dijo que estaba otra vez embarazada y que no lo quería tener. Le dije que se veía muy bonita con los labios pintados pero que debería mejor checarse los labios de allá abajo. ¡Ahora vamos juntas al ginecólogo y ya no nos hacemos burlas!
Ana, 33 años
La salud sexual y anticonceptiva es fundamental para las mujeres, nos impacta para toda la vida. Por eso cambia el discurso, no seas parte de las estadísticas de enfermedades incurables, maternidades obligadas, relaciones de pareja tóxicas, violencia intrafamiliar.
Recuerda que en Fundación Marie Stopes sabemos del AMOR PROPIO y por eso apoyamos tus decisiones en: uso correcto de anticonceptivos, interrupción legal del embarazo, pruebas rápidas de infecciones de transmisión sexual y Papanicolaou, entre otras acciones.
¡No te dejes para el último, para después, para mañana! ¡Demuéstrate amor! Ponte en contacto con Fundación Marie Stopes al whats al 5560512740 o llama al 5555430000.
Por Guadalupe Camacho, @Lupichick, periodista y académica mexicana